¿Sabes cómo conectar con tu ser espiritual? O simplemente, ¿sabes lo que significa la espiritualidad?
Ya varios autores y místicos lo han dicho, “somos seres espirituales viviendo una experiencia humana”, sin embargo nos han enseñado a olvidar esto y a sumergirnos en una “NO realidad”, vivir en una ilusión que no nos pertenece en esencia.
A medida que avanzamos en la vida vamos adquiriendo patrones mentales que nos hacen “ser” (entre comillas) de una determinada manera, estos patrones conforman nuestro Ego o personalidad. Ciertamente son patrones que adquirimos de forma automática y sin consciencia para proteger a ese niño o niña puro e inocente, nos sirven en ese momento, pero al ser inconscientes en que lo hemos adquirido queda ahí como un mecanismo de defensa, que NO nos permite conectar con nuestro ser interno y espiritual.
Dependiendo de tu nivel de consciencia, a medida que más y más te sumerges en este camino, logras tener un entendimiento de tu espiritualidad. Comienzas a reconocer que somos seres infinitos, diferencias entre lo que es parte de esta ilusión, como por ejemplo el Ego, y lo que realmente “eres” en escencia.
Pero principalmente, el mayor acto de consciencia es cuando descubres el “Nosotros”, hay 2 ilustraciones de esto que me encantan, que describen lo infinitos que somos.
La primera es la imagen de que el Mar es la energía universal, o dios, como prefieras llamarlo y cada uno de nosotros somos una gotita de este mar. ¿Puedes negar que al sacar esa gotita del mar, la gotita deja de ser mar? El mar contiene la gotita, la gotita contiene el mar y cada gotita contiene a las otras gotitas. ¿Lo puedes ver? ¿Ves la capacidad que tenemos de fundirnos con lo infinito?
La primera es la imagen de que el Mar es la energía universal, o dios, como prefieras llamarlo y cada uno de nosotros somos una gotita de este mar. ¿Puedes negar que al sacar esa gotita del mar, la gotita deja de ser mar? El mar contiene la gotita, la gotita contiene el mar y cada gotita contiene a las otras gotitas. ¿Lo puedes ver? ¿Ves la capacidad que tenemos de fundirnos con lo infinito?
La otra ilustración es un poco más moderna y nos permite un poco hacer la diferencia entre alma (esencia) y ego. Imagina que tu alma es la señal del wifi, tu computador es tu cuerpo físico y tu ego el IP, el IP es lo que permite individualizar cada computador dentro de la red, así como el ego te da una identidad a ti, lo que te hace ser diferente a otros, asociado a tu forma de actuar, pensar e incluso sentir emociones. Podríamos agregar que El Ego también está asociado a los programas que vas instalando en tu computador. Por otro, lado la señal de wifi vendría a ser tu alma, es cómo podemos acceder a la información qué hay en la red, la red sería la energía universal, infinito, Dios o como prefieras llamarlo. ¿Ves cómo se refleja el ser infinito que somos? ¿Puedes negar que la señal del wifi que compartes con tu vecino (considerando la misma compañía) no es la misma? Ves cómo podemos desconectarnos de esta señal?
Lo que les quiero mostrar con estas ilustraciones es que ya somos seres espirituales, siempre lo hemos sido, el problema es que no somos consciente de esto, vamos por la vida dormidos y en piloto automático. No hay una fórmula exacta para poder acceder a esta consciencia, ya que hablando desde el ego todos somos diferentes, y cada camino para llegar a esta consciencia espiritual va a ser diferente.
Por otro lado tampoco es algo constantes, vamos a ir entrando y saliendo de la consciencia continuamente, vamos a ir despertando y aveces durmiéndonos en este camino.
La buena noticia es qué hay diferentes herramientas disponibles que han descubierto sabido y místicos, como un camino para acceder a esta consciencia y que nos permiten experimentar el infinito. Solo debes descubrir cuál es la que más te ayuda a ti.
Parafraseando a Patricia Pay, en una entrevista que escuché el otro día, “En concreto el camino espiritual es volver a reconectar con tu ser y escencia, tomando consciente de todos los obstáculos que te impiden acceder a eso, y que te dejen de poseer. Para esto el ser humano necesita tener un Dharma, una disciplina, no te vas a liberar de los ruidos mentales solo por recitar una vez un mantra. Hay que ejercer un compromiso y disciplina contigo mismo. Repetir la práctica de forma diaria y constante. Incluso hay cosas simples que se pueden ir haciendo como la consciencia plena, en tu quehaceres cotidianos.
La invitación es a conectar contigo… busca todo aquello que te lleve a ese estado. Y realízalo de forma constante.
Te Abraza
Magdalena Gallardo Holder
Yoga y Sonido Chile